BEIJING, 8 ago (Xinhua) — Este verano, un nuevo libro que reúne artículos de altos funcionarios chinos y más de 100 preguntas y respuestas, se ha convertido en una guía de referencia para quien busque entender mejor el más reciente plan de reformas de China. La obra, con 310.000 caracteres chinos, ofrece una mirada en profundidad a las estrategias que configuran el futuro de la nación, y explica las iniciativas establecidas en una decisión adoptada en julio acerca de una mayor profundización integral de la reforma para avanzar en la modernización china. Esta guía integral contiene un apéndice que esclarece la terminología oficial, de la cual este artículo selecciona seis términos para ilustrar la agenda de la reforma de China: economía del estreno, industrias del futuro, capital paciente, nuevas formas de empleo, sociedad favorable a la natalidad y economía plateada. ECONOMÍA DEL ESTRENO En medio de los esfuerzos por desarrollar un sistema completo de demanda interna, China planea promover activamente la economía del estreno. Se trata de la emoción y el entusiasmo que acompañan al lanzamiento de algo nuevo. Basta recordar la efervescencia que se siente cuando se presenta un nuevo teléfono inteligente o cuando un automóvil eléctrico de última generación llega al mercado. Esa es la economía del estreno en acción. Abarca todo, desde la primera presentación de un producto, la apertura de tiendas insignia y el lanzamiento de nuevos servicios, hasta la creación de tecnologías y modelos emergentes de negocios. Sin embargo, la importancia de esta economía no reside solo en eventos de lanzamiento de nuevos productos, o en exhibiciones de una marca y desfiles. Más valiosa aún es la creación de un nuevo modelo de negocios, es decir, la formación de una red compuesta por investigación, desarrollo, lanzamiento, exhibición, promoción y venta de un nuevo producto, afirma Zhang Yina, profesora de la Universidad Fudan, con sede en Shanghai. Puede pensarse de esta manera: cada vez que se lanza un nuevo producto, como el más reciente teléfono inteligente, reloj inteligente o incluso una aplicación, se pone en marcha toda una cadena de actividad económica. Las compañías muestran sus innovaciones, abren tiendas, establecen centros de investigación e incluso nuevas sedes para apoyar estos lanzamientos. Entonces, ¿por qué es importante? Pues bien, esta economía es un signo de cuán moderno, de alta calidad e innovador es un lugar. Muestra cuán fuerte y vibrante es la actividad económica local, lo poderosos que son los consumidores y la capacidad de una región en términos de innovación. También es una medida de cuán competitiva es en el escenario internacional, la fortaleza de su imagen de marca y su disposición para abrirse a nuevas ideas. Algunas ciudades reconocidas por ser grandes centros del comercio minorista de China, como Shanghai y Guangzhou, han revelado una serie de medidas destinadas a impulsar la economía del estreno, las cuales contemplan el apoyo a marcas internacionales de alta calidad con el fin de que abran sus primeras tiendas en el país. De igual modo, plantean la agilización de procedimientos en aras de aprobar el lanzamiento de productos, y la facilitación del despacho de aduanas de artículos importados que se presentan como novedad. INDUSTRIAS DEL FUTURO En consonancia con el nuevo plan maestro de la reforma, China establecerá un mecanismo orientado a garantizar aumentos en la financiación para las industrias del futuro. Estas actúan en campos impulsados por tecnologías de vanguardia que recién comienzan a despegar, pero poseen un enorme potencial. Es posible entender estas industrias como los nuevos niños del barrio que están destinados a convertirse en grandes estrellas. Pueden ser de gran importancia, revolucionarias y un poco impredecibles, pero eso las hace tan apasionantes. Están preparadas para impulsar la próxima ola de transformación tecnológica e industrial, erigiéndose en actores clave del crecimiento económico. Se espera que sean las principales fuentes de nuevas fuerzas productivas de calidad. China se está centrando en varias áreas clave, a saber: fabricación futura, tecnología de la información, materiales, energía, espacio y salud. El país está invirtiendo abundantes recursos y capacidad intelectual en frentes realmente interesantes, como la inteligencia artificial (IA), la inteligencia similar a la cerebral, la tecnología cuántica, la fabricación a escala atómica (que trabaja en dimensiones incluso más pequeñas que la nanotecnología), la biofabricación, los robots humanoides, la economía de baja altitud (especializada en drones y otras tecnologías de vuelo bajo) y la energía del hidrógeno. Las industrias del futuro no solo tienen que ver con nuevos dispositivos vistosos, sino también con cambiar fundamentalmente la forma en que vivimos, trabajamos y nos divertimos. Son opciones estratégicas llamadas a determinar el panorama de la próxima ola de innovación global. Además, cultivar y expandir estas iniciativas, emergentes y futuras, ayudará a construir nuevas ventajas en el desarrollo industrial chino y mejorará la competitividad internacional de la industria nacional, destacó Deng Zhou, investigador de la Academia de Ciencias Sociales de China. CAPITAL PACIENTE China fomentará y regulará el desarrollo de la inversión ángel, el capital de riesgo y la inversión de capital privado; aprovechará mejor el papel de los fondos de inversión gubernamentales y trabajará para promover el desarrollo del capital paciente. Este, a diferencia de otras inversiones que apuntan a ganancias rápidas, se concentra en las ganancias a largo plazo. No se deja influir por las oscilaciones del mercado a corto plazo, sino que está dispuesto a soportar los altibajos para lograr rendimientos mayores y más sostenibles en el tiempo. Li Sanxi, investigador de la Universidad Renmin de China, cree que el concepto ha desempeñado un papel positivo en la mejora de la vitalidad y la confianza de varios tipos de inversión de capital. El capital que no se ve perturbado por las fluctuaciones cortoplacistas del mercado y puede proporcionar un soporte financiero estable para proyectos de inversión a un término prolongado es un motor importante para acelerar el cultivo y la expansión de nuevas fuerzas productivas de calidad, indicó Li. Imagine que está plantando algo. Las inversiones regulares son como plantar verduras de crecimiento rápido. El capital paciente, por otro lado, es como sembrar un roble. Tarda más en crecer, pero una vez que se afirma, es fuerte, estable y brinda beneficios por generaciones. ¿Cuál es su importancia? Bien, resulta esencial para los proyectos grandes e innovadores con potencial para transformar nuestro mundo. Es el tipo de financiación que respalda la tecnología de punta y la innovación industrial. Pensemos en el desarrollo de nuevas tecnologías médicas, proyectos de energía renovable o avances revolucionarios en IA. No son victorias rápidas: precisan tiempo, dinero y la capacidad de afrontar los riesgos. El Consejo de Estado de China publicó en junio un conjunto de medidas encaminadas a desarrollar el capital paciente. El país revisará las regulaciones sobre la administración de las empresas de capital de riesgo con inversión extranjera con el propósito de facilitar que los inversores extranjeros participen en este capital dentro del territorio. NUEVAS FORMAS DE EMPLEO China tiene como objetivo apoyar y regular el desarrollo de las nuevas formas de empleo. Una encuesta reciente sobre el estado de la fuerza laboral nacional reveló que 84 millones de personas están empleadas en estas nuevas formas en todo el país. Se trata de ocupaciones surgidas con el auge de Internet y la economía digital. Entre ellas se cuentan los repartidores de comida, los conductores de vehículos compartidos para el transporte de pasajeros y los vendedores en línea que dependen de plataformas virtuales. La flexibilidad de estos roles resulta excelente para ampliar las oportunidades laborales y equilibrar el mercado ocupacional. Por ejemplo, si alguien requiere encontrar empleo rápidamente, a menudo puede conseguir uno de los mencionados en menos tiempo del que demanda acceder a uno tradicional. Adicionalmente, se multiplican las posibilidades para quienes requieren horarios de trabajo no tradicionales, como algunos padres y estudiantes. Las nuevas formas de empleo han mejorado la eficiencia en la asignación de recursos laborales y han ampliado la escala ocupacional. Ayudarán a cambiar la estructura del mercado de trabajo y estimularán la innovación y el espíritu emprendedor, evaluó Yu Shaoxiang, investigador principal de la Academia de Ciencias Sociales de China. No obstante, con estas modalidades también surgen desafíos. Una cuestión fundamental es garantizar la calidad de tales empleos y proteger los derechos de los trabajadores. Con tal fin, China construirá un sólido sistema de seguridad social para atender a las personas con trabajos flexibles, así como a los trabajadores rurales migrantes y a quienes se desempeñan en nuevas formas laborales, y ampliará la cobertura de los programas de seguro de desempleo, compensación de trabajadores y seguro de nacimiento, según el plan de reforma. SOCIEDAD FAVORABLE A LA NATALIDAD China reforzará su estrategia de desarrollo demográfico en respuesta al envejecimiento de la población y la disminución de la tasa de natalidad. Se esforzará por construir una sociedad favorable a la natalidad. En términos prácticos, el gobierno cumplirá un papel enorme al otorgar servicios que cubran a todos, durante toda su vida. Esto se traduce en una atención sólida en salud, una educación accesible y un apoyo integral a las familias en todos los escenarios. Asimismo, se están implementando políticas que facilitan y hacen más asequible tener hijos. Estas contemplan exenciones fiscales, incentivos para la vivienda y mejores licencias parentales. Un factor determinante para decidir si una región cuenta con posibilidades de lograr un desarrollo sostenible es si adopta políticas estratégicas y de largo plazo de apoyo a los nacimientos, comentó el profesor Yang Chenggang de la Universidad de Finanzas y Economía del Suroeste. Igualmente, una sociedad que sea amigable a los partos depende de la cultura y la actitud de las personas. Esto significa promover enfoques positivos sobre el matrimonio y la familia, alentar las responsabilidades parentales compartidas y crear un diálogo público que respalde y celebre tener descendencia. Es garantizar que la sociedad en su conjunto considere la crianza de la próxima generación como una responsabilidad compartida. Con un entorno favorable a la natalidad, China aspira a mantener un tamaño poblacional estable y garantizar que haya suficientes jóvenes para sustentar la economía y cuidar de las generaciones mayores. Elevar la tasa de nacimientos a niveles más sostenibles no es una misión imposible, pero tampoco un objetivo fácilmente alcanzable. Al esforzarse por obtener una relación más armoniosa entre la población, los recursos y el medio ambiente, el país busca consolidar aún más su ventaja de contar con un vasto mercado y mejorar de constantemente su fortaleza nacional general. ECONOMÍA PLATEADA China se ha propuesto desarrollar la «economía plateada», que abarca todas las actividades económicas dirigidas a brindar productos y servicios a los adultos mayores. Esto engloba todo, desde atención médica, ofertas de comida y cuidados, hasta áreas más especializadas, como los artículos antienvejecimiento, los viajes adaptados a las personas mayores y los productos financieros diseñados para la jubilación. Las estadísticas muestran que el valor de esta economía en el país se sitúa en la actualidad en torno a los siete billones de yuanes (unos 980.580 millones de dólares), y se espera que alcance unos 30 billones de yuanes para 2035. Piense que sus abuelos necesitaran formas más cómodas de acceder a la atención sanitaria, ofertas de viajes más agradables o incluso implementos cotidianos mejor diseñados que les faciliten la vida. La economía plateada consiste en crear y optimizar estos servicios y productos para satisfacer esas demandas. China está enfocando su atención en este sector, pues se enfrenta a un cambio demográfico marcado por un envejecimiento de sus habitantes, al igual que sucede en muchas otras economías del planeta. Al finalizar 2023, los chinos de 60 años o más sumaban 297 millones, lo que representa el 21,1 por ciento de la población total. Entre este grupo, 217 millones tenían 65 años o superaban esa edad, esto es, el 15,4 por ciento de la población. De acuerdo con los estándares internacionales, el país cuenta ahora con una sociedad moderadamente envejecida. Con esta realidad muy presente, se trabaja para asegurar a su población en envejecimiento que pueda vivir cómodamente y con dignidad, aprovechando al mismo tiempo el nuevo potencial económico. En conjunto, estos seis términos describen una estrategia integral de reforma que resalta el compromiso chino con la innovación, la sostenibilidad y la inclusión. Fin