• Mié. Mar 19th, 2025

ENTREVISTA: Fallas en líneas de transmisiones y en monitoreo provocaron apagón en Chile, explica experto

Poradmin

Mar 3, 2025

Por Cristóbal Chávez Bravo SANTIAGO, 28 feb (Xinhua) — El apagón eléctrico ocurrido el pasado 25 de febrero en Chile, que afectó al 98 por ciento de la población, se debió a fallas en dos líneas de transmisiones (servicio y respaldo) en el norte del país, cuyo retorno a la normalidad fue ralentizado por un error en los sistemas de monitoreo, explicó el experto Héctor Chávez. El académico de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Santiago de Chile explicó a Xinhua que la infraestructura de transmisión afectada estaba transmitiendo más o menos la misma cantidad de energía que consume la capital chilena, Santiago, es decir, 1,8 gigavatios de potencia. Este valor representa entre el 15 y el 20 por ciento de la energía que estaba consumiendo el sistema eléctrico nacional en ese minuto. El doctor en ingeniería eléctrica e informática profundizó que la línea que falló, Nueva Maitencillo-Nueva Pan de Azúcar, ubicada en el norte del país, es de 500 kilovatios y tiene un circuito de respaldo. «Vale decir, cuando falla la línea, hay otro circuito al lado, otra línea que estaba de ‘back up’ (respaldo)», dijo. «Usualmente estas fallas ocurren. Estas líneas pueden fallar, pero como tiene este ‘back up’ al lado, uno no se entera como usuario, porque no se interrumpe el servicio o pasan pequeños eventos que pueden tener un impacto no muy significativo en la demanda», agregó Chávez. El académico, sin embargo, puntualizó que en esta ocasión ocurrió la falla en las dos líneas al mismo tiempo por razones que se investigan. «Eso ocasionó que estos 1,8 gigavatios de electricidad dejaran de transmitirse desde el norte hasta el centro-sur de Chile. Los sistemas eléctricos del norte y del centro-sur de Chile se separaron y provocó ese desbalance de 1,8 gigavatios». «Ese desbalance energético en estos dos sistemas que se separaron produjo el ‘black out’ (apagón) que pudimos observar y que afectó a todo el sistema», indicó. El apagón ocurrió la tarde del martes pasado y afectó al 98,5 por ciento de los clientes del servicio, unos 19 millones de personas entre las regiones de Arica y Parinacota, en el norte, y Los Lagos, en el área austral, un territorio que se extiende por unos 2.400 kilómetros. El presidente de Chile, Gabriel Boric, dijo la noche del apagón que el corte de energía fue debido a una falla eléctrica de la empresa ISA InterChile, en la línea que va entre Vallenar y Coquimbo, en el norte del país. «La reposición del servicio demoró mucho tiempo», profundizó Chávez, porque la luz en promedio retornó a las ocho horas, pero en algunas localidades el apagón se extendió hasta el día siguiente. El experto en sistemas de energía abundó que Chile tuvo «black out» similares en 2011 y en 2010, este último como consecuencia del terremoto de magnitud 8,8 y posterior tsunami que se registró en febrero, aunque el académico apuntó que en esas ocasiones la reposición del servicio fue más rápida. «La causa que se ha dado para esa situación es que los sistemas de monitoreo, de la infraestructura del sistema eléctrico, que tienen que reportar en tiempo real el estado de la infraestructura al Centro de Comando del Coordinador Eléctrico Nacional (CEN) tuvieron algún tipo de falla», precisó. Por esa razón fue «más difícil coordinar la vuelta al servicio, la que finalmente se empezó a hacer de manera manual por llamados telefónicos, comunicación vía radio y eso ralentizó la vuelta al servicio». El académico dijo que una de las hipótesis de esta falla es el error humano, porque «es bien difícil que sin ninguna intervención externa puedan fallar dos circuitos de una línea tan grande de doble circuito y que tiene redundancia en todo sentido; redundancia en la instrumentación de control que tienen la línea, en las protecciones». «Las versiones iniciales del CEN indican que fue algo por el estilo y que en ese caso la responsabilidad, según nuestro marco regulatorio, recae sobre la empresa que opera ese segmento de transmisión», aseveró. Chávez apuntó que aunque las excepcionalidades «deben ser tratadas como tal», dada la magnitud del «black out», el sistema se debe preparar por «cualquier cosa que tenga la posibilidad de ocurrir», siempre al tener en cuenta «que los desastres naturales de gran magnitud están fuera de ese análisis». «En este caso hubo un problema operativo (…) es una lección para tener un control más estricto sobre la operación de la infraestructura de parte de las empresas», concluyó el experto. Fin

Por admin

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *