Por Sylvia B. Zárate BOGOTÁ, 29 dic (Xinhua) — La economía colombiana cerró el 2025 con un balance positivo, en un entorno internacional complejo marcado por tensiones geopolíticas, proteccionismo y una transición hacia un multilateralismo más diversificado, afirmó el profesor Carlos Martínez Becerra, miembro de la Academia Colombiana de Ciencias Económicas. El también exdirector de Observatorio de Economía Internacional de la Universidad Nacional de Colombia conversó con Xinhua sobre el desempeño económico del país sudamericano que evaluó como positivo. «Ha sido un desempeño positivo en varios indicadores macroeconómicos, incluso en el comportamiento de la Bolsa de Valores y de las ganancias significativas del sector financiero», subrayó. Martínez comentó que «los datos eliminan relatos» y destacó que en el plano macroeconómico, en los tres primeros trimestres de 2025 la economía colombiana acumuló un crecimiento interanual cercano al 2,8 por ciento, mientras que en el tercer trimestre el PIB registró un aumento interanual del 3,6 por ciento, acompañado de una inflación controlada del 5,2 por ciento y una tasa de desempleo del 8,2 por ciento. Esas cifras, sumadas a la tasa de cambio que se estabilizó alrededor de los 3.800 pesos por dólar, generaron un clima de confianza relativa en los mercados a medida que el país gira su dinámica económica internacional. «En términos externos ha sido notable el proceso de revaluación del peso y la importancia del Foro China-CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) por cuanto ha sido una ruta que rompe el unilateralismo que ha conducido la política económica del país», consideró el académico. Martínez subrayó la importancia de que en 2025 Colombia se adhiriera a la Iniciativa de la Franja y la Ruta y al Nuevo Banco de Desarrollo, hecho que según él «abre un espacio ancho para optar por una tercera vía en las relaciones económicas internacionales». El analista explicó que en el ámbito del aporte externo/interno se han fortalecido las remesas, mientras que a lo interno es evidente el fortalecimiento del consumo privado y de inversiones como estimuladores del Producto Interno Bruto (PIB). «En términos internos se destaca el fortalecimiento de la agricultura y del turismo como factores generadores de un cambio importante en la estructura del PIB, pero también del comercio exterior», afirmó el experto. Según el economista, los avances más significativos se han dado en el ámbito social como componente estructural de la política económica, términos de distribución de la tierra, ruptura parcial de la estrategia rentista minero-energética y fortalecimiento de industria manufacturera. «Los más significativos están asociados al mejoramiento en infraestructura de transporte ferroviario, el fortalecimiento de la industria manufacturera, la diversificación de comercio exterior con la incorporación explícita de África, Medio Oriente y Asia como elementos potenciales hacia el multilateralismo en términos geopolíticos, monetarios y de comercio», opinó. Sin embargo, consideró que se evidenció un retroceso asociado a la fractura de los procesos integracionistas de la región latinoamericana y del Caribe y advirtió que los desafíos para la economía colombiana en 2026 serán la incertidumbre derivada de los resultados en elecciones presidenciales, la dinámica de los países de la región y la actitud «neoproteccionista» de Estados Unidos. De igual forma subrayó la necesidad de que Colombia, independientemente del gobierno de turno, construya una política de Estado a mediano y largo plazo que permita mantener las ventajas de haber logrado modificar su modelo económico y adaptarse al evidente cambio mundial. «Colombia cambia de modelo, pero el mundo también. El nacional-proteccionismo de Estados Unidos es la continuidad modificada del tradicional proteccionismo hacia adentro y liberalismo hacia afuera que hoy enfrenta un nuevo multilateralismo vigoroso liderado por los BRICS, el debilitamiento del dólar, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial y la nueva arquitectura financiera», apuntó. «El unilateralismo se ha fracturado», aseveró. «Las potencialidades para Colombia están asociadas ahora a una nueva matriz energética, minerales críticos, recursos forestales, café, frutas, turismo de salud, avistamiento de aves, servicios digitales, tierras raras y economía azul», agregó. El desempeño económico de Colombia también ha sido destacado en informes externos como el de la reconocida revista británica «The Economist», que recientemente ubicó al país andino como la cuarta economía con mejores resultados relativos de 2025 entre los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Fin
- Mié. Dic 31st, 2025