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Flota de la aviación brasileña creció un 6 % en el último año

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Ago 5, 2024

RÍO DE JANEIRO, 5 ago (Xinhua) — La flota de aviación general, también conocida como aviación ejecutiva, creció un 6 por ciento en Brasil entre junio de 2023 y el mismo mes de este año y alcanzó las 10.285 aeronaves operativas, según divulgó hoy la Asociación Brasileña de Aviación General (Abag). Sin embargo, los retrasos en las entregas de aeronaves siguen en el radar, ya que los fabricantes siguen luchando para satisfacer la acalorada demanda en el segmento de la aviación ejecutiva. El crecimiento de la flota en los últimos 12 meses fue impulsado por los modelos turbohélice, que registraron un aumento del 15,4 por ciento, seguidos de los reactores, con un incremento del 12,5 por ciento, y los helicópteros de turbina, con un aumento del 8,8 por ciento. Los modelos de pistón y helicóptero de pistón crecieron un 2,1 por ciento y un 0,4 por ciento respectivamente. «La aviación general va muy bien en Brasil, especialmente este año. No dejamos nada que desear en relación a los países desarrollados», afirmó el director general de Abag, Flávio Pires, en declaraciones a la prensa. El ejecutivo señaló que el tamaño continental del país, junto con las deficiencias de la aviación regular, crean un escenario favorable para el desarrollo del sector. La previsión es que el segmento tenga cerca de 948.200 aterrizajes y despegues hasta 2024. De confirmarse esta cifra, representará un aumento del 2,3 por ciento en comparación con el año pasado. Con el mercado al rojo vivo, Pires dijo que los interesados en adquirir aviones ejecutivos aún se enfrentan a una lista de espera que puede alcanzar los 2,5 años. Antes de la pandemia, el periodo oscilaba entre 9 y 12 meses. Los retrasos reflejan la dificultad de reanudar la cadena de producción, paralizada durante la crisis sanitaria y que desde entonces no ha alcanzado el ritmo necesario para hacer frente a la fuerte recuperación de los diferentes segmentos de la aviación. «Seguimos teniendo un déficit y un desequilibrio, porque no ha habido una desaceleración de las ventas, mientras que la capacidad de producción es menor», explicó el director general de la Abag. El ejecutivo recordó que la recuperación de la aviación general fue más rápida que la de la comercial, ya que la paralización de los viajes regulares estimuló la compra de aviones privados. Este escenario acabó generando aún más demanda. Aún así, Pires ve una mejora, con un elevado número de entregas previstas para este año de aeronaves compradas en la época de la pandemia. «El impacto que estamos viendo hoy está digitalizado para 2021, pero el sector va a toda velocidad y el número de entregas está creciendo», afirmó. Fin

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