LA HABANA, 20 dic (Xinhua) — El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, afirmó hoy que el 2024 ha sido «uno de los años más difíciles» para el país caribeño, acosado por la crisis provocada por la hostilidad de Estados Unidos, el duro entorno económico internacional y los problemas estructurales de la economía nacional. El mandatario clausuró una semana de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento unicameral), a las que asistió también el líder histórico, Raúl Castro. Díaz-Canel hizo una autocrítica al «explicar los enormes esfuerzos y los aún insuficientes resultados en la gestión presidencial, frente a los obstáculos que se nos han impuesto y la injusticia predominante en las relaciones económicas internacionales». Denunció que la principal causa de los problemas del país es la guerra económica de Estados Unidos, que ha convertido a Cuba, dijo, en el país con más años bajo el bloqueo de Washington. Sin embargo, señaló que las dificultades impuestas por la política agresiva de Washington no eximen a las autoridades de ejercer la autocrítica y la rectificación de las imperfecciones, en el enfrentamiento a las problemáticas y actitudes que obstruyen el avance. Díaz-Canel adelantó que su Gobierno se ha preparado para un segundo mandato de Donald Trump, aunque casi a renglón seguido reiteró la voluntad cubana de dialogar y desarrollar relaciones de igualdad con Estados Unidos. No obstante, afirmó que Cuba enfrentará «contundentemente cualquier intento de injerencia en los asuntos internos. Es una posición conocida y no debe sorprender a nadie». Acerca del contexto internacional y los cambios que reconfiguran el panorama político mundial, con repercusiones en todos los ámbitos, consideró que el 2024 «llega a sus días finales con un escenario internacional altamente preocupante». «La ambición expansionista del imperialismo, impulsada por Estados Unidos, eleva el peligro del uso de armas nucleares en Europa a límites seriamente preocupantes», señaló, tras advertir que el peligro de una conflagración mundial está más cerca que en cualquier otro momento del último medio siglo. También denunció el genocidio contra el pueblo palestino por parte de Israel, con el abierto apoyo de Estados Unidos y de otros aliados, que calificó como una de las mayores atrocidades que haya conocido la humanidad y que ocurre a la vista de todos. Díaz-Canel destacó el ingreso de Cuba al grupo BRICS como miembro asociado, y la permanencia en la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños. Sobre la situación interna del país, aseguró que comienzan a verse señales positivas, aunque todavía tienen un impacto limitado y en ese sentido destacó la reducción del déficit fiscal. «Esa es la resistencia creativa a la que estamos llamados, la única fórmula que posibilita el triunfo de un pequeño pueblo sin recursos contra el poderoso adversario», añadió. Reconoció que los últimos meses de 2024 han sido «particularmente complejos», tras el golpe de dos huracanes, dos terremotos y tres caídas totales de su sistema eléctrico nacional. El presidente cubano insistió en la necesidad de dialogar con la población, de argumentar, controlar, sistematizar y socializar las buenas experiencias para pasar de los diagnósticos a la transformación. «Con la historia que nos precede y el pueblo que tenemos, la única alternativa es luchar hasta la victoria siempre», subrayó Díaz-Canel. En la jornada final de la sesión parlamentaria se aprobó una nueva Ley del Ejercicio de la Abogacía y la Organización Nacional de Bufetes Colectivos, la cual, a ojos del ministro de Justicia, Óscar Silvera, coloca a los ciudadanos en mejor situación para la defensa y el respeto a sus derechos. Los diputados además aprobaron un cronograma legislativo que incluye la elaboración, discusión y aprobación de 38 leyes entre los años 2025 y 2027, para complementar la Constitución aprobada en 2019. Fin